Margaret Astur
2004-11-30 22:56:15 UTC
ENGAÑANDO, QUE SON VOTOS
Si ustedes oyen hablar de "ética" en un debate político, no tengan duda
alguna: quien pronuncia la palabra se la está azotando a un rival metanos
los focicos. Porque con respecto a la actuación propia, la única ética que,
en general, rige es la de la optimización de los recursos y la maximización
de los beneficios, esto es, la ampliación al máximo del poder de los de uno
(y del ramillete de empleos, que, como empresas, significan los grandes
partidos) y la disminución del de los competidores. De este modo, todas las
actuaciones tienen como finalidad tres objetivos: la excitación permanente
de la parroquia propia, la captura de algún electrón libre, el estímulo de
la defección o el desistimiento en las filas rivales. Sentado esto, no
juzguen ustedes lo que sigue como una especial maldad de los logómacos, sino
como la forma misma de actuar en política de algunos partidos, es decir,
como simples cosas del oficio, sin mayor iniquidad.
HOSPITAL.
PSOE e IU han acordado una Proposición no de Ley en el Congreso de los
Diputados (aclaremos que el valor normativo de la Proposiciones no de Ley es
aproximadamente el de las rogativas para pedir la lluvia), en virtud de la
cual el Gobierno se compromete a poner "algún día" "no se sabe qué cantidad"
para el Hospital Central de Asturies (cuyo propaganda ya ha folleteado el
señor Areces en tan lujosos como costosos cartafueyos hace dos años). Es
posible que, mientras firmaban tal enormidad, Rubalcaba y Llamazares
cantaran, como acompañamiento, entre emotivo y descriptivo, aquellos versos
de "Caballo Viejo": "nuestro amor no tiene horario, ni fecha en el
calendario". Quizás convendría, por otro lado, aclarar que esos millones del
limbo futuro son los mismos que, en su día, ya en 1999, el señor Areces se
negó a aceptar de Aznar, idénticos a los que el Presidente asturiano
manifestó que tendríamos en cuanto ganase Zapatero, los mismos que éste
prometió por dos veces (una en campaña, la otra en Rodiezmo) que
recibiríamos, netos los que prometió la ministra del ramo en visita
reciente, primos hermanos de los que, hace dos semanas, IU aseguró que había
puesto en los presupuestarios papeles del Estado y que luego desaparecieron.
Desde luego, nunca tantos no-millones fueron sopelexaos por tantos.
Quizás también se debiese recordar que los únicos dineros reales que están
poniéndose -después de tantos años de promesas y mentiras- para el Hospital
Central (al margen de los arecianos folletos en color y otres caxigalines
propagandístiques que se repartieron gratuitamente) son los que cada uno de
ustedes apurren cuando compran un litro de combustible o compran una
mercancía o servicio más caro porque en él ha repercutido la tasa especial
del Gobierno socialista asturiano.
PRESUPUESTOS.
No lo creerán ustedes, pero los milagros existen. IU plantea a sus socios de
Gobierno una durísima batalla y las cuentas asturianas crecen, tras ella, en
doce (o catorce, según otras versiones) millones de euros. ¿Se ha recurrido
a pedir perres a los bancos para ello? No. ¿Se van a subir los impuestos
para que unos presupuestos -ya llevados, según se afirmaba, al límite en sus
previsiones de ingresos-, reciban más dinero de los contribuyentes? No. ¿Qué
ha pasado? Pues lo de "La Soberana", que "la que va pela pradera / muncho
ximielga la saya, / y si yo fuera con ella / mucho más la ximielgara. / La
dŽenriba non ye dŽella, / la dŽembaxo ye emprestada."
EL MUSEL.
Llevaban varios años cantando aquello de "para hacer esta muralla, pongamos
todos las manos" (o era "¿tráiganme todas las manos?", estoy lejos de mi
biblioteca y no puedo comprobarlo). Amenazaron con cantarle aquello de
"devórame otra vez" al horizonte y la playa. Acusaron al Gobierno central de
entorpecer la puesta en marcha de los nuevos planes, y ahora -después de
tanto tiempo- caen de la burra y se enteran de lo que sabía cualquier
persona que tuviese un mínimo de información: que no se podía licitar una
obra si no había consignación para ello.
Es verdad que en Xixón están muy hechos a proyectos que se confeccionan sólo
por entretener a la ciudadanía (el tranvía areciano, su estación de
autobuses, las famosas lanzaderas -precursoras de la IDE-, el plan de
fachadas de El Muro, el anterior concurso de la estación ferroviaria...),
con lo que ya nada sorprende. En todo caso, convendría que todos estos
cantadores matutinos explicasen, por si el dinero llega o no llega, en
cuánto van a repercutir en los costes de explotación los intereses del
(teórico, por ahora) crédito que el Puerto peor gestionado de España -de
donde los barcos y los tráficos se alejan-, deberá pedir, y de qué manera
ese aumento de los costos disuadirá el aumento de actividad.
IZAR.
Ya sabía de sobra el señor Zapatero que no podía él arreglar el problema de
los astilleros, por más que, como las sirenas a Ulises, cantase a los
obreros de La Naval aquello de "con dinero y sin dinero, hago siempre lo que
quiero, y mi palabra es la ley"; ya conocía sin lugar a dudas el Gobierno
que Bruselas no iba a aceptar el nuevo plan de la SEPI. Lo que están
haciendo es, simplemente, engañar y ganar tiempo, hasta que puedan aplicar
el plan bueno, el que tienen diseñado desde el principio, y que,
ciertamente, perjudicará más a Juliana y Asturies que a nadie.
Por cierto, ¿no estamos en el corazón de Europa? ¿No somos el corazón de
Europa? ¿Cómo es que, por más que nos hagamos la foto con Chirac y Schröder,
y regalemos jamones a este último, nadie nos hace caso. Entonemos: "¿Dónde
estás corazón?, no oigo tu palpitar".
CORIAS.
Finalmente (por hoy, que hay muchos más quilómetros de la misma tela), ¿han
visto ustedes lo de Corias? Desde hace años, es posible que lustros, se
viene prometiendo, por los socialistas, allí un centro hotelero de
categoría. Alguien descubre que tampoco este año hay consignación
presupuestaria para ello. Al día siguiente aparece la noticia: "Va a
efectuarse de forma inmediata un estudio que va a realizar los estudios
preliminares para estudiar la viabilidad en Corias, y pataplán rataplán".
Supongo que lo que, aliviados, estarán cantando los que dieron con tan
magnífico ejemplo de logomaquia, será aquella canción asturiana cuya primera
versión grabada pertenece al Gaiteru de Lliberdón: "Tres camises traigo
agora / ya non me llamen la pendexona: / una téngola nel telar / y otra
téngola por filar / y otra toi filando agora / ya non me llamen la
pendexona".
Por cierto, no se les escapará que la música que enmarca todas estas
actuaciones -que no constituyen sino una actualización talantantera del
"panem et circenses" romano- es aquella con que Gabi, Fofito y Milikito
hicieron famoso su espectáculo: "Había una vez un circo, que alegraba
siempre el corazón".
Xuan Xosé Sánchez Vicente
Presidente del Partíu Asturianista (PAS)
http://www.asturianista.as
Si ustedes oyen hablar de "ética" en un debate político, no tengan duda
alguna: quien pronuncia la palabra se la está azotando a un rival metanos
los focicos. Porque con respecto a la actuación propia, la única ética que,
en general, rige es la de la optimización de los recursos y la maximización
de los beneficios, esto es, la ampliación al máximo del poder de los de uno
(y del ramillete de empleos, que, como empresas, significan los grandes
partidos) y la disminución del de los competidores. De este modo, todas las
actuaciones tienen como finalidad tres objetivos: la excitación permanente
de la parroquia propia, la captura de algún electrón libre, el estímulo de
la defección o el desistimiento en las filas rivales. Sentado esto, no
juzguen ustedes lo que sigue como una especial maldad de los logómacos, sino
como la forma misma de actuar en política de algunos partidos, es decir,
como simples cosas del oficio, sin mayor iniquidad.
HOSPITAL.
PSOE e IU han acordado una Proposición no de Ley en el Congreso de los
Diputados (aclaremos que el valor normativo de la Proposiciones no de Ley es
aproximadamente el de las rogativas para pedir la lluvia), en virtud de la
cual el Gobierno se compromete a poner "algún día" "no se sabe qué cantidad"
para el Hospital Central de Asturies (cuyo propaganda ya ha folleteado el
señor Areces en tan lujosos como costosos cartafueyos hace dos años). Es
posible que, mientras firmaban tal enormidad, Rubalcaba y Llamazares
cantaran, como acompañamiento, entre emotivo y descriptivo, aquellos versos
de "Caballo Viejo": "nuestro amor no tiene horario, ni fecha en el
calendario". Quizás convendría, por otro lado, aclarar que esos millones del
limbo futuro son los mismos que, en su día, ya en 1999, el señor Areces se
negó a aceptar de Aznar, idénticos a los que el Presidente asturiano
manifestó que tendríamos en cuanto ganase Zapatero, los mismos que éste
prometió por dos veces (una en campaña, la otra en Rodiezmo) que
recibiríamos, netos los que prometió la ministra del ramo en visita
reciente, primos hermanos de los que, hace dos semanas, IU aseguró que había
puesto en los presupuestarios papeles del Estado y que luego desaparecieron.
Desde luego, nunca tantos no-millones fueron sopelexaos por tantos.
Quizás también se debiese recordar que los únicos dineros reales que están
poniéndose -después de tantos años de promesas y mentiras- para el Hospital
Central (al margen de los arecianos folletos en color y otres caxigalines
propagandístiques que se repartieron gratuitamente) son los que cada uno de
ustedes apurren cuando compran un litro de combustible o compran una
mercancía o servicio más caro porque en él ha repercutido la tasa especial
del Gobierno socialista asturiano.
PRESUPUESTOS.
No lo creerán ustedes, pero los milagros existen. IU plantea a sus socios de
Gobierno una durísima batalla y las cuentas asturianas crecen, tras ella, en
doce (o catorce, según otras versiones) millones de euros. ¿Se ha recurrido
a pedir perres a los bancos para ello? No. ¿Se van a subir los impuestos
para que unos presupuestos -ya llevados, según se afirmaba, al límite en sus
previsiones de ingresos-, reciban más dinero de los contribuyentes? No. ¿Qué
ha pasado? Pues lo de "La Soberana", que "la que va pela pradera / muncho
ximielga la saya, / y si yo fuera con ella / mucho más la ximielgara. / La
dŽenriba non ye dŽella, / la dŽembaxo ye emprestada."
EL MUSEL.
Llevaban varios años cantando aquello de "para hacer esta muralla, pongamos
todos las manos" (o era "¿tráiganme todas las manos?", estoy lejos de mi
biblioteca y no puedo comprobarlo). Amenazaron con cantarle aquello de
"devórame otra vez" al horizonte y la playa. Acusaron al Gobierno central de
entorpecer la puesta en marcha de los nuevos planes, y ahora -después de
tanto tiempo- caen de la burra y se enteran de lo que sabía cualquier
persona que tuviese un mínimo de información: que no se podía licitar una
obra si no había consignación para ello.
Es verdad que en Xixón están muy hechos a proyectos que se confeccionan sólo
por entretener a la ciudadanía (el tranvía areciano, su estación de
autobuses, las famosas lanzaderas -precursoras de la IDE-, el plan de
fachadas de El Muro, el anterior concurso de la estación ferroviaria...),
con lo que ya nada sorprende. En todo caso, convendría que todos estos
cantadores matutinos explicasen, por si el dinero llega o no llega, en
cuánto van a repercutir en los costes de explotación los intereses del
(teórico, por ahora) crédito que el Puerto peor gestionado de España -de
donde los barcos y los tráficos se alejan-, deberá pedir, y de qué manera
ese aumento de los costos disuadirá el aumento de actividad.
IZAR.
Ya sabía de sobra el señor Zapatero que no podía él arreglar el problema de
los astilleros, por más que, como las sirenas a Ulises, cantase a los
obreros de La Naval aquello de "con dinero y sin dinero, hago siempre lo que
quiero, y mi palabra es la ley"; ya conocía sin lugar a dudas el Gobierno
que Bruselas no iba a aceptar el nuevo plan de la SEPI. Lo que están
haciendo es, simplemente, engañar y ganar tiempo, hasta que puedan aplicar
el plan bueno, el que tienen diseñado desde el principio, y que,
ciertamente, perjudicará más a Juliana y Asturies que a nadie.
Por cierto, ¿no estamos en el corazón de Europa? ¿No somos el corazón de
Europa? ¿Cómo es que, por más que nos hagamos la foto con Chirac y Schröder,
y regalemos jamones a este último, nadie nos hace caso. Entonemos: "¿Dónde
estás corazón?, no oigo tu palpitar".
CORIAS.
Finalmente (por hoy, que hay muchos más quilómetros de la misma tela), ¿han
visto ustedes lo de Corias? Desde hace años, es posible que lustros, se
viene prometiendo, por los socialistas, allí un centro hotelero de
categoría. Alguien descubre que tampoco este año hay consignación
presupuestaria para ello. Al día siguiente aparece la noticia: "Va a
efectuarse de forma inmediata un estudio que va a realizar los estudios
preliminares para estudiar la viabilidad en Corias, y pataplán rataplán".
Supongo que lo que, aliviados, estarán cantando los que dieron con tan
magnífico ejemplo de logomaquia, será aquella canción asturiana cuya primera
versión grabada pertenece al Gaiteru de Lliberdón: "Tres camises traigo
agora / ya non me llamen la pendexona: / una téngola nel telar / y otra
téngola por filar / y otra toi filando agora / ya non me llamen la
pendexona".
Por cierto, no se les escapará que la música que enmarca todas estas
actuaciones -que no constituyen sino una actualización talantantera del
"panem et circenses" romano- es aquella con que Gabi, Fofito y Milikito
hicieron famoso su espectáculo: "Había una vez un circo, que alegraba
siempre el corazón".
Xuan Xosé Sánchez Vicente
Presidente del Partíu Asturianista (PAS)
http://www.asturianista.as